Organizaciones del colectivo lgbtiq+ y de defensa de los derechos humanos reclaman Justicia por la muerte de una persona trans en una comisaría de Pilar.
Sofía Inés Fernández, de 39 años, murió el 10 de abril en la comisaría 5ta de Pilar, donde la primera hipótesis que barajó la Justicia fue la de un suicidio.
A la comisaría llegó detenida por un presunto robo, aunque sus familiares aseguran que ella escapaba de un asalto y que por eso intentó ingresar a una vivienda, cuyos dueños la denunciaron.
“Nadie se suicida en una comisaría”, dice una frase que acompaña la foto de Sofía que se difunde en redes sociales.
“Mi hermana se había anotado en un curso de enfermería y estaba contenta con este nuevo comienzo”, le dijo a Diario PH Alejandro, el hermano de Sofía.
En tanto, organizaciones por los derechos humanos y del colectivo lgbtiq+ se organizan para llevar adelante una movilización para saber qué pasó con Sofía.
“Sofi (…) fue detenida y encarcelada en la Comisaría 5ta de Derqui. A la familia nos notifica primero un oficial, que dice que Sofi se encontraba perdida, pero luego, otro oficial, contradiciéndose con la primera información, dijo que continuaba detenida por una supuesta acusación de robo”, contaron los familiares.
“El mismo lunes la encuentran sin vida en la celda. A la 1.30 de la madrugada del martes 11 se hacen presentes en el domicilio una psicóloga con Gendarmería para informarle a la hermana que Sofi había fallecido en la celda, no sabían si por muerte súbita. Luego, dicen desde la comisaría que fue un supuesto suicidio. La autopsia indica que Sofi muere por asfixia”, agregaron.
Además, insistieron en que la mujer “no tenía motivos para suicidarse, había pedido el cambio de nombre en el DNI, tenía que comenzar la carrera de enfermería el 17 de abril”.