El Municipio de Pilar aseguró que en los próximos días adecuará una serie de lomos de burro que construyó un colegio privado.

El establecimiento Lucero Norte decidió el fin de semana pasado colocar con cemento tres reductores sobre la calle Las Alondras, para obligar a que los autos circulen a menor velocidad, debido a que vecinos de la zona se quejaban por el paso de rodados que van a la escuela.

Si bien padres de chicos que concurren al establecimiento habían señalado a Pilar de Todos que habían sido los frentistas los que levantaron las lomadas, en rigor fue el colegio, desde donde incluso pidieron disculpas por medio de un
comunicado enviado a los responsables de los alumnos.

“Estimadas familias, ante todo quiero pedirles disculpas por los inconvenientes y justificados disgustos generados por el nuevo reductor de velocidad de la calle Las Alondras, el cual ya ha sido modificado para evitar problemas de circulación”, dice el escrito al que tuvo acceso Pilar de Todos.

“Junto a todos los vecinos de la manzana, muchos de los cuales tienen algún hijo, nieto, sobrino o primo dentro de nuestras aulas, hemos acordado trabajar juntos para mejorar la circulación y la convivencia en un maro de dialogo y respeto, el cual les pido nos ayuden a mantener y nutrir. Adicionalmente la Municipalidad, por intermedio del señor Juan Manuel Moraco, titular de la Subsecretaría de Gestión Territorial III, se ha comprometido a realizar nuevos trabajos y mejoras sobre el reductor durante este fin de semana y dejarlo con las dimensiones reglamentarias y debidamente señalizado”, añadió el representante legal del establecimiento, Guido Meldini.

En ese sentido, fuentes de la Comuna señalaron a este medio que en efecto los reductores fueron realizados por el Colegio, pero que estos se readecuarán para que no sean dañinos para los rodados que allí circulan, aunque al mismo tiempo manifestaron que es necesario reordenar el tránsito en el área.