En una extensa entrevista concedida al programa Agenda Propia FM, el intendente Federico Achával repasó en cómo se está preparando el sistema de salud público para darle pelea al coronavirus, enfatizó en que se ha aumentado considerablemente la asistencia alimentaria a alumnos de escuelas públicas, familias y merenderos, no descartó a futuro aplicar mecanismos alternativos de recaudación para fortalecer las cuentas locales, fuertemente impactadas por el parate económico, e insistió en que la clave sigue siendo en que la sociedad cumpla con el aislamiento obligatorio.
-¿Cómo está la situación en Pilar desde lo sanitario? ¿Cómo está respondiendo el sistema público de salud?, preguntó Agenda al jefe comunal.
-Nuestro sistema de salud, que venimos reajustando día a día, tratando de tomar decisiones para ampliar la cantidad de camas, terapia intensiva, aislamiento, por ahora viene funcionando muy bien. Ayer tuve la oportunidad de estar en el Hospital Sanguinetti, donde recibimos una nueva donación, en este caso de un respirador. El fin de semana estuve en el Meisner, que abrimos justamente para camas de aislamiento. Y lo cierto es que hasta ahora el sistema municipal viene con capacidad para absorber los casos que tenemos. Hay algunos que están en nuestros hospitales y otros que están en el sistema privado. Por ahora no hemos tenido ningún inconveniente a los efectos de poder dar acompañamiento en términos de salud a aquellos casos que han dado COVID positivo o los que presentan síntomas y necesitan del acompañamiento sanitario-, respondió el mandatario.
-¿Ya se están utilizando algunos de los centros de aislamiento, como el de la Sociedad Hebraica o el de la Villa Marista?
-No todavía. Lo que hemos abierto es el Meisner, que al día de hoy tiene 6 personas en aislamiento por haber dado positivo y por lo tanto existe la necesidad de tenerlos en aislamiento. Pero todavía no hemos tenido la necesidad de abrir Hebraica ni Villa Maristas, donde tenemos más de 600 camas de aislamiento.
-Todo esto tiene que ver obviamente con que se está logrando, al menos en principio, que la curva de contagios no sea exponencial. ¿Cómo estás evaluando el cumplimiento de la cuarentena en Pilar?
-Hay una cuestión que es fundamental: El aislamiento social preventivo y obligatorio mostró en el tiempo que es una medida absolutamente efectiva a los efectos de evitar el contagio y la propagación del COVID. Es fundamental reiterarle a la gente que la mejor forma de cuidarnos es quedarnos en casa y tomando las precauciones que tienen que ver con limpiar los ambientes, superficies, objetos. Vemos que hay un montón de vecinos que lo están cumpliendo. Aquellos que tienen que salir por una necesidad, les pedimos que también nos cuiden a todos, que respeten las filas de los bancos. Desde el Municipio estamos tomando medidas para que esas filas se hagan con el cuidado sobre todo para nuestros adultos mayores, respetando distancias. Hicimos la vacunación (antigripal) casa por casa para los mayores de 65 años, porque lo más importante para dar la pelea contra el COVID es que la gente se quede en sus casas, fundamentalmente los mayores de 65 años. Este tiempo de cuarentena nos ha permitido reajustar nuestro sistema de salud, ir mejorándolo todos los días, ir terminando las obras, como la UDI de Derqui, creemos que sigue siendo fundamental el aislamiento.
-Una de las cuestiones colaterales de la cuarentena tiene que ver con el parate económico que se vive no solo en Pilar sino en el país y el mundo. ¿Qué tanto ha caído la recaudación y si se están pensando algunos mecanismos alternativos de recaudación desde lo local para apuntalar las cuentas municipales?
-El Municipio no es ajeno a la realidad mundial que tiene impacto a nivel nacional, provincial y municipal. Nuestra mirada está puesta sobre la gente, y el primer análisis que hacemos en términos económicos es cómo hacemos para garantizar que todas las familias de Pilar tengan un plato de comida sobre la mesa. Por eso universalizamos el SAE para llegar a todos los chicos de las escuelas públicas. Hemos aumentado la asistencia considerablemente para aquellas familias que ya tenían una necesidad del Estado, pero que vivían de la changa, el día a día, y hoy no tienen esa oportunidad. Hemos aumentado el acompañamiento para merenderos y comedores, y hemos establecido más de 29 puntos solidarios con ollas populares para tratar de garantizar comida no solo a través de bolsas de mercadería, sino también con alimentos calientes. Tenemos las preocupaciones de las arcas municipales, estamos analizando todos los días distintas medidas, que hablamos con provincia y nación, para garantizar el funcionamiento del municipio, para poder pagarles a los médicos, a los que trabajan en desarrollo social, horas extras a la policía de la provincia. Pero la mirada fundamentalmente está puesta sobre la gente que es la que está haciendo la mayoría del esfuerzo, que es la que se está quedando en sus casas y así cuidarnos entre todos.
-A nivel nacional se está dando la discusión de un impuesto a la riqueza, medidas municipales como por ejemplo en Castelli con un impuesto a productores agropecuarios, en San Isidro se ha anunciado un remate de 40 propiedades muy costosas de gente que debe una enorme cantidad de tasas municipales. ¿Se puede empezar a pensar en Pilar algún tipo de medida local más allá de los recursos que puedan aportar nación o provincia?
-Nosotros analizamos todos los días los números y tenemos reuniones que tienden a buscar alternativas para el caso que no podamos continuar prestando el servicio que estamos dando. Yo soy muy prudente en esa línea, porque entiendo que el esfuerzo hoy, producto de la situación económica, lo estamos haciendo entre todos y creo que venimos con una mirada de pedirle un esfuerzo a aquellos que más tienen. Pero en ese contexto, hay que ser absolutamente prudentes, porque este aislamiento, este parate de un montón de rubros, está teniendo un impacto económico no solo para la Municipalidad sino también para las empresas, por lo que hay que hacer un análisis muy pormenorizado de cada situación. Y sin lugar a dudas vamos a buscar alternativas en caso de que lo creamos conveniente y necesario para garantizarle a los pilarenses su salud y un Estado presente.
-Cuando uno ve los positivos (de COVID-19) de la región, ve que Pilar es uno de los que más casos reúne, junto con San Isidro y Vicente López. ¿En ese contexto se puede pensar con algunas actividades en particular en administrar la cuarentena en Pilar o crees que por el contrario hay que seguir con el mismo esquema actual?
-Es una cuestión que estamos discutiendo con los intendentes de la región, porque no estamos aislados. Recibimos nosotros una gran cantidad de vecinos que volvieron del extranjero, y eso tiene un impacto sobre los casos que tenemos. Como así también la cantidad de muestras que estamos sacando, por encima de las que están haciendo otros municipios y eso se refleja en nuestros números. Tenemos una decisión desde el primer día de ser absolutamente transparentes, claros, no solamente con la detección de los casos sino también en la comunicación. Y además de eso, nos han visto actuar rápidamente para tratar de contener cada uno de los focos donde pueda haber contagio, como lo fue la clausura de un local (el hipermercado Carrefour) cuando se dio un caso positivo, aislando a todos los que tuvieron contacto directo con la persona que dio positivo. Escuchamos con mucha atención la conferencia que dio Alberto (Fernández), en que la prioridad está puesta en cuidar la salud y cuidar la vida, y en ese contexto es que nosotros analizamos cada uno de los reclamos y pedidos de muchísimos vecinos que dependen de su negocio, empresa, y ven la oportunidad de abrir por el impacto económico. Pero a todos los hacemos entrar en la misma razón. La mejor forma, está demostrado a nivel nacional y a nivel de lo que ha pasado en el mundo, de sostener la economía es cuidando la salud, y nosotros estamos por esa línea y vamos a seguir con esa mirada.
-¿Te preocupa la seguridad? En estos días volvieron a verse algunos casos de delitos, uno de ellos con algún grado de gravedad por la violencia ejercida contra la víctima, algo que en los primeros tiempos de la cuarentena también se había reducido…
-Lo cierto es que nos ocupa la seguridad. Tanto la salud, desarrollo social, como el tema del control de la seguridad para nosotros son cuestiones prioritarias y que desde el primer día que decretamos la emergencia fue una de las secretarías consideradas esenciales. Obviamente es una cuestión a atender por parte de los municipios. Yo siempre he planteado que si bien es una responsabilidad primaria de la provincia de Buenos Aires, entiendo que los intendentes tenemos la necesidad de actuar en materia de seguridad y así lo estamos haciendo. Con respecto a los casos que se sucedieron, como el día de ayer, hemos contactado a las víctimas y hemos puesto al Municipio a disposición con todas sus herramientas para esclarecer los hechos, porque entendemos que es fundamental actuar rápido.
-¿Cómo estás viendo el humor social en los barrios, hay algún monitoreo particular de que esto no redunde en alguna situación de violencia social?
-Lo que veo es una conciencia sobre que la decisión del aislamiento social es una medida acertada del gobierno nacional. Tenemos la oportunidad de caminar en la decisión que tomamos de vacunar casa por casa para los mayores de 65 años, o ahora que estamos haciendo el acompañamiento del SAE, tenemos la oportunidad de conversar con los vecinos y lo primero que siente es que volvieron a tener un Estado que los cuida, que los protege, que la prioridad es la salud y luego viene lo demás. Obviamente en ese contexto se encuentran un montón de vecinos preocupados por su situación económica, pero toda esa gente también está informada de lo que está pasando alrededor del mundo y entiende que es un esfuerzo que necesita de todos. Si uno tiene que medir el humor social, tiene que ver con una conciencia muy importante de la lucha que se está haciendo contra el COVID-, cerró el intendente.