Un policía de la Ciudad de Buenos Aires asesinó a balazos a una mujer en un gimnasio del partido bonaerense de Moreno y tras permanecer atrincherado más de diez horas en el lugar finalmente se suicidó de un disparo en la sien. La víctima fatal era la actual novia de su exmujer.

El episodio comenzó cerca de las 16.30, cuando el policía, identificado como Gabriel Fernando Danielo, de 39 años, llegó al gimnasio “Imperio” ubicado en la calle Roque Sáenz Peña al 2228 para reunirse con la dueña del local, su expareja, Anabella Viviana Florentín, con quien tenía tres hijos en común. Fuentes judiciales indicaron que el lunes la mujer había radicado una denuncia por violencia de género y en la puerta del local Marcela Fabiana Heredia, quien era la novia de Florentín, le impidió el ingreso a Danielo. Entonces el policía le disparó al menos tres veces y la mató en el acto.

Según el medio local Semanario Actualidad, el cadáver de Heredia quedó sobre la calle Centenario, a metros de Saenz Peña. La Policía Científica no podía acercarse por el operativo que se realizaba. Finalmente, pasadas las 00.30 del miércoles hicieron un examen preliminar y trasladaron el cadáver al Cuerpo Médico Forense de General Rodríguez.

El primer piso
Fuentes de la investigación consultados por el medio local Primer Plano Online reconocieron que cuando Danielo llegó, tras dispararle a Heredia, subió al primer piso de “Imperio” y “habló cara a cara con su exesposa, que incluso trató de persuadirlo y quitarle el arma. Nunca estuvo secuestrada ni fue tomada como rehén”.

Fuera del gimnasio, en tanto, se montó en gran operativo con la participación de 300 agentes, una decena de francotiradores y el cuerpo de Bomberos de Moreno. La negociación se extendió por más de 10 horas y participaron agentes de fuerzas especiales como la Unidad Táctica de Operaciones Inmediatas (UTOI) y del Grupo Halcón, además de negociadores de la Policía bonaerense.

En todo momento sus respuestas fueron que ya tenía la decisión tomada de quitarse la vida. En medio de esas conversaciones intentaron hacer que deponga su actitud con audios enviados por sus padres y de un hermano, en el que le pedían que reflexione y piense en ellos y en sus hijos. Además, su propio abogado estuvo presente y le explicó que podía llegar a cambiar la carátula del caso para obtener una pena menor. “No, esto fue un femicidio y yo no voy a ir preso de por vida”, fueron sus contestaciones.

Al uniformado, quien prestaba servicio en la Comisaría de la Comuna B, en el barrio porteño de Palermo, se lo había acusado de los delitos de homicidio agravado y resistencia a la autoridad.

Todo terminó cuando a eso de las 2.30 Gabriel Danielo se disparó en la cabeza. Ingresó el Grupo Halcón y certificó su herida. Bomberos y profesionales del SAME lo subieron a una ambulancia y lo trasladaron al hospital provincial Mariano y Luciano de La Vega. Pese a la gravedad de la herida, tenía signos vitales. Murió en el quirófano del centro sanitario.

El caso es investigado por la fiscal Betiana Guillerón, de la Fiscalía Nº 2 del Departamento Judicial Moreno-General Rodríguez, quien estuvo presente en el lugar junto a la secretaria de la UFI, Carla Fernández, supervisando el trabajo policial. (DIB) ACR/MM