La Justicia avanza con la investigación por el brutal femicidio de Denisse Pazos Giménez, una adolescente de 16 años asesinada por su pareja de 17.
Ahora, la lupa de los investigadores está puesta en reconstruir el vínculo que había entre ambos, además de analizar imágenes de cámaras de seguridad de la zona donde está ubicada la casa donde se llevó a cabo el crimen, con el objeto de conocer los últimos movimientos de la víctima y el victimario.
Denisse fue ahorcada hasta su muerte por quien era su pareja, en la casa de este, en la calle Las Gardenias y El Cardenal, del barrio La Alborada.
De acuerdo a lo indicado por fuentes policiales a Pilar de Todos, el asesino asfixió a la chica luego de una discusión, para luego ir hasta un cuarto en el que se encontraba su madre y la pareja de la mujer, a quienes confesó el crimen.
“La asfixié, la maté”, fue la frase que habría mencionado el menor a su madre, quien se encontraba durmiendo junto a su pareja.
Siempre de acuerdo a la investigación, la madre del joven llamó al 911, comunicación que quedó registrada a las 16:04 horas del pasado martes 12 de noviembre.
El acusado se encuentra detenido por el delito de “Homicidio agravado por el vínculo”, en una causa que lleva la UFI de Responsabilidad Penal Juvenil.
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Según trascendió, ambos adolescentes tenían una relación desde hace un año, al tiempo que los dos concurrían a la secundaria 23 de Presidente Derqui.
No obstante, el vínculo habría terminado hace un mes, algo que el joven rechazaba.
Justamente el encuentro entre Denisse y el joven se habría dado en el marco de ese distanciamiento.
La data de la muerte de acuerdo a los datos preliminares se dio entre las 12.30 y las 16.
Ambos adolescentes habrían llegado a la casa cuando no había ningún adulto en ella, mientras que la madre del joven y su pareja entraron después, y se dirigieron a un cuarto a descansar.
Todos esos movimientos son los que la Justicia busca ratificar, o no, con las imágenes de las cámaras de seguridad.
Además, es clave reconstruir el vínculo que había entre ambos adolescentes.
En ese marco, los investigadores se encuentran analizando también una serie de cartas y fotos que el joven intentó quemar.
“Estamos analizando las filmaciones de las cámaras de seguridad para reconstruir los movimientos de la víctima desde que se fue de la escuela hasta que llegó a la casa del sospechoso”, explicaron fuentes del caso al diario La Nación.
“Se encontraron fotos y papeles que se prendieron fuego, pero no se terminaron de quemar. Estaban en un tacho que, con la lluvia, se llenó de agua. Se analizará si en las cartas hay algún indicio de qué pasaba entre los chicos”, agregaron las fuentes.
