Un consultorio de estética ubicado en la localidad de La Lonja, en Pilar, fue clausurado tras un operativo realizado por la SUBDDI local en el marco de una causa por presuntas lesiones culposas vinculadas a una intervención quirúrgica estética.
La denuncia que originó la investigación fue presentada por un hombre de 34 años, oriundo del partido de Moreno, quien relató que a mediados de enero de 2023 se sometió a un procedimiento que incluía lipoescultura, transferencia glútea y retoque de nariz.
Una de esas operaciones, la segunda, fue realizada por un hombre de 54 años que se presentó como médico cirujano en un consultorio ubicado sobre la calle Caamaño, identificado como M.P por sus iniciales. La víctima aseguró que pagó $300.000 en efectivo, no firmó ningún consentimiento informado, y no recibió comprobante alguno, indicaron fuentes de la investigación a Pilar de Todos. La primeras intervención, en tanto, había sido realizada por el mismo hombre en otro lugar.
Según su relato, tras la cirugía notó omisiones en el procedimiento y zonas que no fueron tratadas como se había pactado. Meses más tarde, en una nueva intervención en Caamaño, sufrió una descompensación, sin que existiera en el lugar equipamiento médico de emergencia.
"No había nada de aparatos médicos para afrontar ningún tipo de contingencia", informaron los investigadores.
Clausuran centro de estética de Pilar tras denuncia por presunta mala praxis https://t.co/7w5sZHS1qF pic.twitter.com/IkFIagQ9jX
— Pilar de Todos (@PilarDeTodos) August 4, 2025
Días después, el paciente desarrolló una infección, debió iniciar tratamiento en un centro médico de su distrito, y a la fecha continúa con focos infecciosos, dolores intensos y pérdida de sensibilidad en una de las zonas intervenidas. La víctima, incluso, aseguró que intentó contactar al profesional ante los cuadros infecciosos, pero este nunca respondió.
La fiscalía interviniente, a cargo del Germán Camafreita (UFI N°2 de Pilar), dispuso tareas de inteligencia que confirmaron la existencia del consultorio y permitieron determinar que habría más personas afectadas por prácticas similares. Ante el cuadro de riesgo y la posible continuidad de las actividades, se ordenó un allanamiento de urgencia, medida que también contó con la cooperación de la Comuna.
La diligencia fue cumplida en el segundo piso del edificio Agora III, donde personal de Policía Científica y SAME Pilar procedió al secuestro de material médico y documentación, incluyendo recetas, registros de pacientes, implantes mamarios, jeringas, botox, productos antisépticos, y un dispositivo de cobro electrónico. También fueron incautados diplomas del profesional.
Además, inspectores del Municipio de Pilar constataron que el lugar no contaba con habilitación sanitaria, motivo por el cual labraron el acta correspondiente y procedieron a la clausura inmediata del establecimiento.
La causa continúa bajo investigación y no se descarta que se sumen nuevas denuncias por parte de otras personas que se habrían atendido en el lugar.
