En una investigación que comenzó en la Ciudad de Buenos Aires, se logró desbaratar una banda que se dedicaba a traficar animales salvajes, en el marco de un operativo que también llegó hasta Pilar.
Es que, tal como informaron desde la Unidad Fiscal Especializada en Materia Ambiental de la Fiscalía de la Ciudad, a cargo de las diligencias, en el distrito se halló un criadero de reptiles del que lograron rescatar 133 serpientes de distintas especies - había pitones, culebras y boas- y otros 33 reptiles exóticos -gecos, varanos y escincos, entre otros-.
Puntualmente, los allanamientos en el distrito se produjeron en la localidad de Villa Rosa, mientras que el resto de las intervenciones se desarrollaron en la zona de Pompeya y Villa Soldati.
En esas zonas, y luego de haber analizado cámaras de seguridad, los integrantes de la banda se instalaban a la vera de las rutas los domingos para ofrecer los ejemplares.
"Los establecimientos y sus responsables no se encontraban en los correspondientes registros, por lo que el fiscal Michienzi, solicitó la clausura provisoria de los tres lugares", informaron desde la Fiscalia de la Ciudad.
Asimismo los presuntos encargados de cada depósito fueron demorados con el objeto de identificarlos y certificar si cuentan con antecedentes penales.
Para el resguardo de las especies halladas, en los operativos también participaron voluntarios de las ONG Aves Argentinas y Pájaros Caídos, quienes colaboraron en la clasificación y posterior traslado de los ejemplares.
Los animales fueron trasladadas al centro de rescate Delta Terra de la Fundación Azara. "Superados los análisis de rigor y la eventual recuperación de heridas y enfermedades, serán liberados en sus correspondientes hábitats naturales", se informó oficialmente.