Vecinos que residen en los barrios linderos a las polémicas termoeléctricas vuelven a alzar la voz ante los incesantes ruidos molestos que esas industrias generan.
Se trata de habitantes que viven tanto en Pilar como en Escobar y que en los últimos días vieron incrementado el deterioro de la calidad de vida debido a los altos decibeles que se detectan y que emanan de las turbinas de las plantas APR Energy y Araucaria Energy, emplazadas entre las localidades de Villa Rosa y Matheu.
Según expresaron desde la entidad 1810 Vecinos Unidos por Pilar, presidida por Raúl Regis, “desde el día 18 de junio hay más de 5000 familias que no pueden vivir por el ruido de las termoeléctricas” y agregaron que según las mediciones que realizaron, los decibeles a los que están expuestos superan ampliamente los permitidos.
“El fin de semana, soportamos entre 63 y 73 decibeles (db), cuando los permitidos en la zona son durante la noche 35db más 7, y de 40 db más 7 durante el día”, se quejaron.
Ante el elevado ruido, los vecinos coincidieron en que “la situación se hace insostenible e inhumana”, y más en el marco de la vigencia del Aislamiento Social, por la pandemia de coronavirus.
“Es imposible vivir encerrado y con este nivel de ruido. Esta situación genera aún más angustia, enojo, problemas de salud devenidos por el stress que provoca el escuchar turbinas de avión durante 24hs seguidas sin cesar”, explicaron desde la entidad.
En tanto, pidieron la intervención de las autoridades pertinentes, desde donde aseguran aun no respondieron a las denuncias realizadas por los habitantes.
“Es un atropello y descuido al ciudadano por parte de las autoridades pertinentes que, en lugar de cuidar a la ciudadanía y controlar a las empresas, da la sensación de que son amparadas, cuando claramente están fuera de toda norma legal”, se quejaron.
Esta no es la primera vez en este año que los vecinos denuncian a las firmas por ruidos molestos. Lo mismo había sucedido el pasado mes de mayo.
Ese mismo mes, el Organismo Provincial para el Desarrollo Sostenible (OPDS) había realizado mediciones para constatar si, en efecto, las plantas provocan contaminación sonora. En ese operativo también hubo análisis de aire y suelo.
Además, a mediados de marzo los intendentes de Pilar y Escobar, Federico Achával y Ariel Sujarchuj habían llevado el reclamo de los vecinos al Gobernador bonaerense, Axel Kicillof.
“En momentos en donde el Coronavirus se lleva toda la atención de nuestra sociedad queremos que los vecinos que sufren por funcionamiento de las termoeléctricas sepan que no vamos a cesar en los esfuerzos por resolver los problemas que genera la presencia de estas centrales”, había expresado el jefe comunal pilarense.