El ministro de Salud nacional, Mario Russo, insistió en que “la vacuna no es una herramienta validada para mitigar el brote” y acusó presiones por parte de los laboratorios para su incorporación en el Calendario Nacional de Vacunación, al tiempo que justificó la estrategia de delegar las responsabilidades de la gestión de la epidemia en las provincias.
“Lo que nosotros decimos, para que quede bien claro, es que la vacuna es segura y eficaz. Ahora bien, yo soy el Ministro de Salud y tengo la responsabilidad de tomar una determinación acerca del Calendario Nacional de inmunización en la Argentina. Lo único que nosotros dijimos es lo que dijo la OPS y lo que nos aconseja la Comisión Nacional de Inmunizaciones (Conain), lo que nos dicen nuestros expertos y lo dice todo el mundo: la vacuna no es una herramienta validada para mitigar el brote. La decisión es personal de cada habitante con su médico de cabecera, porque les recuerdo que esta vacuna necesita prescripción médica para aplicarse”, resaltó el funcionario nacional.
Al tiempo que denunció: “Algunas veces, uno siente que algunos pseudocientíficos que pululan por la por los medios de comunicación y se los presenta como grandes profesores, que muchas veces, muchos de ellos, tienen un muy buen currículum y son personas muy capacitadas, tienen algún conflicto de intereses”.
Y en ese sentido, siguió: “¿A usted no le llama la atención que hace cuatro días que estoy en cadena nacional? Porque aprietan. Aprietan los laboratorios, aprieta la casta. Entiendo que es multicausal, no es mi responsabilidad determinar por qué. Tenemos que empezar a hablar con la verdad. Es mejor decir una verdad incómoda. Hay intereses”.
Asimismo, insistió en que “la decisión, hasta el momento, es no incluir la vacuna en el Programa Nacional de Inmunizaciones. Nosotros estamos trabajando en forma conjunta con la Organización Panamericana de la Salud y la Comisión Nacional de Inmunizaciones, haciendo lo que se llama la farmacovigilancia. Es decir, esta es una vacuna que ha superado la fase tres, en una población de 20.000 pacientes que ha sido segura y efectiva. Pero que todavía está en esta fase de prueba en el terreno que se llama la fase cuatro, que es farmacovigilancia”.
Por otro lado, Russo apuntó contra la gestión anterior “hacían conferencia con 26 infectólogos y un payaso. Se sacaban fotos y se filman en un barrio vulnerable, descacharrando y creen que así suman”.
Por último, tras referirse a la medida sobre repelentes recientemente avalada, que entre otras cosas permitirá “la compra puerta a puerta con una resolución que hicimos desde ANMAT con el Ministerio de Economía”, Russo advirtió que “el ministro Luis Caputo, liberó las vallas que tenían para importar no solo los productores con sus insumos básicos, sino el producto terminado con algunas medidas muy específicas. También tenemos que decir estas verdades incómodas: nosotros no creemos tampoco que el Ministerio de Salud de la Nación es un supermercado para mandarle a los gobernadores, intendentes y ministros de salud de cada una de las regiones (distintos productos), porque así funciona el Ministerio”.
Cabe señalar que ayer las declaraciones de Russo generaron revuelo cuando al hablar sobre la escasez de repelente, aconsejó utilizar ropa manga larga y tener “cuidado con el pantalón corto”. (DIB)